Los órganos autónomos, repartición del botín

Mucho escándalo se ha hecho por la desaparición de los Órganos Constitucionalmente Autónomos, pero poco se ha dicho sobre ¿qué son o eran, para qué y por qué se crearon (la razón verdadera) y cual era el fin de ellos?

Durante los años 2000 se inició toda una propaganda sobre los gobiernos de coalición, donde se decía que para que dos o más fuerzas políticas podían compartir el poder, el gobierno y los ideales de sus representados, existían los gobiernos de coalición. Así, no era raro ver a un Procurador del PAN en el gobierno del PRI, y viceversa, pero no era rentable, porque llegó una voz a decir que eran lo mismo, que se evidenciaba la verdadera forma de gobernar y la ideología de supuestos oponentes, sí, la creación del PRIAN. 

Así que políticamente, como decimos, no era rentable, por lo que se inventan una figura jurídica, los Órganos Constitucionalmente Autónomos, supuestos órganos que no dependen de ninguno de los poderes convencionales, es decir, del Poder Judicial, Legislativo o Ejecutivo, por lo que, al ser autónomos, no dependen de ninguna orden, de ninguna directriz, de ninguna vigilancia en su actuar, es más, ni en los gastos o sus presupuestos. 

Estos órganos se crearon como forma de repartición del poder, sí, mientras el PRI, tenía el gobierno federal, el PAN tenía el Poder Judicial, y el Poder legislativo esta compartido,  pero no era suficiente, se necesitaba que el PAN tuviera injerencia en el presupuesto, en cargos administrativos, que tuvieran la forma de poder ayudar y beneficiar a sus agremiados, a su gente, a sus amigos y compadres.

Qué mejor forma de continuar con el poder compartido y con los beneficios de estar juntos gobernando por tiempo indefinido, dejando una idea a los Mexicanos que esos órganos en verdad traerían como objetivo que el gobierno no tuviera injerencia para beneficiar a sus amigos en los asuntos más importantes, como Telecomunicaciones, Energía, Hidrocarburos, Transparencia entre otros, garantizando que se acabaría la corrupción. Nada más falso. 

Pero ¿cómo garantizar que se cumplieran los acuerdos? Pues a través de la forma de nombramiento de sus titulares. El presidente de la república proponía y el Senado de la república aprobaba, dejando claro que si el presidente no proponía a quien el PAN quería, no era aprobado en el Senado. Así se formaron esos monstruos de órganos autónomos. 

En realidad, era una repartición del botín de los ladrones, pues mientras el PRI o PAN tenían la Administración Pública (gobierno federal) el otro partido tenía a sus órganos autónomos, que podían hacer y deshacer como quisieran sin tener ninguna consecuencia, pues no existía órgano alguno que pudiera vigilarlos y mucho menos sancionarlos, es decir, eran libres de utilizar el presupuesto público en sus lujos y en sus formas de esparcimiento. 

¿Qué beneficios trajeron estos órganos autónomos?, el petróleo lo vendieron a extranjeros, la energía eléctrica también, en telecomunicaciones, no hay nada de ventaja, el servicio es malo, no llega a todos lados y es caro. Y en el tema que más les preocupa a los de la oposición, debemos preguntarnos realmente, ¿qué beneficio tenemos los ciudadanos comunes y corrientes? Nada, la transparencia no genera ningún beneficio económico o social, pues el obrero no requiere tener acceso a la transparencia, el taxista, el mesero, el repartidor, el carnicero, el de la tienda de la esquina, la trabajadora doméstica, el de intendencia, el abogado litigante, el ingeniero al construir un puente, el mecánico, el albañil, etc, en nada.

Entonces, ¿qué defiende la oposición? Sus privilegios, el poder ir a los centros nocturnos gratis, sí gratis porque lo pagábamos todos; poner a sus amigos, esposas, esposos, amantes, hijos, sobrinos y demás parentela en esos órganos, sin tener que rendir cuentas a nadie, sin tener que decirle a nadie qué o por qué lo hacían. 

Es totalmente claro que esos órganos, eran un gobierno alterno, un gobierno que les permitía tener privilegios y dinero para poder seguir comprando conciencias y ser apoyados por los grandes empresarios extranjeros, y les preocupa que, ante la desaparición de esos órganos, se ventiles todas las corruptelas que realizaron para favorecer a extranjeros. Es por eso que gritan desesperados que no desaparezcan, pues veremos grandes fraudes, grandes traidores a la patria que entregaban a las empresas extranjeras la riqueza de nuestro territorio, las riquezas de nuestro país. 

Hoy podemos decir, por fin se acabará estos grandes atracos al Pueblo, estas grandes corruptelas, estos grandes despilfarros y grandes atrocidades que han hecho la oligarquía corrupta de México. 

“Bienvenido el Segundo Piso de la Cuarta Transformación”.