En estos días ha habido controversia por la reforma a la Ley de Instituciones de Crédito y por las cuentas bancarias sin actividad y no reclamadas. Como ya incontables veces diversos medios, comunicadores y en redes sociales ha habido desinformación para atacar al gobierno.
Dicha reforma fue aprobada por la Cámara de Diputados el 11 de octubre de este año; y con 483 votos a favor, cero en contra y una abstención y, en lo particular, con 366 votos a favor, 102 en contra. Así que es una reforma aprobada con amplias mayorías de uno de los poderes soberanos, y no un acto arbitrario del presidente.
La reforma consiste en que el dinero, intereses o rendimientos de cuentas que no muestren actividad en seis años puedan ser utilizadas por el Gobierno Federal para beneficencia pública o labores de seguridad. Si los montos en dichas cuentas son menores a 52 mil pesos, serán para beneficencia pública, si son superiores serán para labores de seguridad pública.
Pero una noticia real alterada, para mostrarla como falsa, no es suficiente para la comentocracia opositora e inconformes, también ha circulado que el presidente ahora también usará las Afores de forma discrecional; señalamientos que van desde que serán “embargadas” o “expropiadas” en diversas actividades. Lo mencionado este jueves 13 de octubre por el presidente Andrés Manuel fue que revisará las Afores y el Sistema de Ahorro para el Retiro, derivado de las graves pérdidas (minusvalías) en los montos de las cuentas individuales de los trabajadores.
Las Afores son Administradoras de Fondos para el Retiro, existen diez. Son empresas que administran las cuentas individuales de los trabajadores. Cada trabajador tiene una cuenta Individual donde se acumulan las aportaciones que periódicamente aportan el patrón, el gobierno y el trabajador. Estas aportaciones son invertidas por las Afores a través de lineamientos estrictos; cuando este se pensione ese dinero será usado para su pensión. Además, las Afores son supervisadas por la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (CONSAR); por lo tanto hay toda una regulación por diversas leyes e instituciones.
Las Afores tienen exigentes regulaciones y estas no pueden ser utilizadas discrecionalmente por nadie, ni por el Gobierno federal. Que haya acusaciones, es otro ataque, otra noticia falsa.
El presidente tiene la probidad y convicción de atender un importante tema público como lo es el sistema de pensiones. A lo largo de este año (existen algunas alteraciones desde el 2020 por la pandemia) las Afores han tenido pérdidas muy graves (por cierto, PENSIONISSSTE, la Afore del Gobierno, es de las que menos ha perdido), incluso algunas han tenido meses sin ninguna ganancia, solo perdidas.