Comenzamos una gran época de campañas que terminará hasta el 2024, pero hemos visto algo en las ultimas campañas políticas en México. Hoy la política moderna parece estar cada vez más alejada de las necesidades y preocupaciones de los ciudadanos. Los políticos, parecen estar más interesados en cultivar una imagen pública atractiva y pulcra, que en escuchar y responder las demandas de sus electores. En lugar de discutir temas de relevancia y comprometerse con soluciones concretas, muchos políticos se limitan a ofrecer discursos vacíos y promesas vagas que suenan bien, pero carecen de sustancia
La falta de comunicación efectiva y de compromiso real con los ciudadanos no solo es frustrante, sino que también es peligrosa para la democracia en sí misma. Si los políticos no están dispuestos a escuchar y responder las demandas de los ciudadanos, entonces la confianza en las instituciones democráticas se erosionará y las personas se alejarán cada vez más de la política.
Para que la política sea verdaderamente democrática, los políticos deben comprometerse a escuchar y responder a las necesidades y preocupaciones de los ciudadanos. Esto significa tomar en serio las opiniones de la gente y trabajar activamente para solucionar los problemas que les importan. Sólo de esta manera podemos asegurar que la política se mantenga conectada con las personas y cumpla su propósito fundamental: servir a la sociedad.
Muchos candidatos han optado por estrategias que los mantiene alejados del pueblo y en una especie de burbuja política. Le apuestan más al tema digital o aire, el problema radica en que, hoy al alejarse de los ciudadanos, no pueden conocer sus necesidades, problemas o propuestas y al no conocer esta realidad toman decisiones que muchas veces no sirven para la sociedad.
Además, el alejamiento de los políticos con sus electores fomenta la desconfianza y desinterés en la participación política, los ciudadanos no se sienten representados, escuchados ni atendidos por los políticos, y por lo tanto, no ven a la política como una herramienta para el cambio social. Los políticos no representan a la población y no trabajan para mejorar sus vidas, entonces ¿Para qué sirve la democracia? si los políticos se preocupan sólo por su propia carrera y poder, entonces ¿Cómo podemos esperar que tomen decisiones justas y equitativas que beneficien a todos?.
Es por eso que se necesita un cambio en la forma en que los políticos se acercan a los ciudadanos y no solamente en épocas electorales, deben dejar de lado estrategias aisladas y enfocarse en tener contacto directo y cercano con la ciudadanía, escuchar sus necesidades, atender sus demandas y trabajar juntos para lograr resolver las verdaderas necesidades de la población.
En resumen, el alejamiento de los políticos con sus electores es un problema grave que afecta a la democracia y la confianza en la política. Es necesario un cambio de actitud por parte de los políticos coma para que puedan representar de manera efectiva a la ciudadanía y lograr los cambios que tanto dicen desear.
Para lograr esto, hoy los ciudadanos deben hacer oír su voz y exigir más de sus políticos. Dejar de aceptar promesas vacías y comenzar a exigir acciones concretas, apoyar a aquellos políticos que realmente representan los intereses generales y desafiar a aquellos que no lo hacen. Sólo entonces podemos asegurarnos que la democracia sirva realmente como una herramienta para la población y no sólo a los intereses de unos pocos.