La tormenta invernal que afecta varias regiones de Estados Unidos ha ocasionado que más de 9,000 vuelos sean cancelados o retrasados debido a las condiciones climatológicas.
Los aeropuertos que resultaron más afectados fueron los de Nueva York (John F. Kennedy, LaGuardia y Newark) y el de Boston, en la zona noreste de Estados Unidos. En Nueva York se acumularon 10 centímetros de nieve, mientras que en zonas de Long Island se registraron entre 17.7 y 19 centímetros de nieve.
Ante las interrupciones, American Airlines, United Airlines y JetBlue Airways informaron que eximieron del pago de tarifas por cambio de vuelos a quienes resulten afectados por el mal tiempo.
De igual forma, se emitieron avisos de tormenta de hielo y alertas de clima invernal en gran parte de Pensilvania y Massachusetts, por lo que las autoridades locales impusieron restricciones al tránsito de vehículos comerciales en varias autopistas interestatales.
Al respecto, El Servicio Nacional de Meteorología (NWS) advirtió que un segundo sistema invernal se aproxima a la región medio oeste del territorio estadounidense y se prevé que la tormenta se intensifique este 28 de diciembre, avanzando hacia la región de los Grandes Lagos para la madrugada del lunes.
El NWS advirtió que el sistema traerá numerosos peligros invernales desde la noche del domingo, incluidas condiciones de ventisca y acumulaciones de nieve superiores a 30 centímetros en áreas del Alto Medio Oeste y la región de los Grandes Lagos.
Las autoridades de Nueva York, Pensilvania, Nueva Jersey y Connecticut, emitieron alertas meteorológicas alertando a la población para tomar previsiones, además de que desplegaron equipos de trabajo para limpiar las carreteras.
Por otro lado, California, en la costa oeste de Estados Unidos, sufrió fuertes lluvias esta semana, pero el NWS pronostica que las lluvias empezarán a ceder el fin de semana. El fuerte temporal y las inundaciones asociadas obligaron a cerrar el aeropuerto de Santa Bárbara, al noroeste de Los Ángeles.