Con 187 votos a favor, dos en contra y una abstención, la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas aprobó la trigésima segunda resolución contra el embargo de Estados Unidos hacia Cuba.
Los únicos países que votaron en contra del proyecto titulado “Necesidad de poner fin al bloqueo económico, comercial y financiero impuesto por los EE.UU. de América contra Cuba" fueron Estados Unidos e Israel, mientras que la abstención fue de la República de Moldavia.
El proyecto, presentado por Cuba, reafirma, entre otros principios, “la igualdad soberana de los Estados, la no intervención y no injerencia en sus asuntos internos y la libertad de comercio y navegación internacionales, consagrados en numerosos instrumentos jurídicos internacionales”, y exhorta a todos los Estados a abstenerse de promulgar y aplicar leyes y medidas que los contravengan, instando a la derogación de ese tipo de medidas a quienes aún las impongan.
El representante permanente de México ante la ONU, Héctor Vasconcelos, llamó a Washington a levantar esa medida el pasado 29 de octubre: “Sólo así podremos ayudar a dar un paso decisivo hacia la consolidación de un hemisferio más próspero y competitivo, pero sobre todo más justo y pacífico compuesto por naciones soberanas”, señaló.
El bloqueo a Cuba comenzó en 1960 y se fue endureciendo en diferentes momentos históricos, alcanzando a terceros países a partir de 1992, fecha en la que la Asamblea General emitió su primera petición a Estados Unidos para ponerle fin.