El Ejército de Israel lanzó nuevos ataques en la frontera sur con Líbano y comenzó una ofensiva terrestre en territorio libanés este 30 de septiembre.
Las Fuerzas Armadas israelís lanzaron la madrugada de este lunes y el pasado domingo una serie de bombardeos contra el grupo Hezbolá en Líbano, lo cual provocó más cien muertes, en territorio libanés.
Los bombardeos en territorio del Líbano se dieron dos días después de que el Ejército de Israel habría asesinado al líder del movimiento islamista libanés, Hasán Nasralá, junto con decenas de otros miembros del grupo, tras estos ataques.
De acuerdo con el Ministerio de Salud libanés, José Levy, los ataques aéreos israelíes causaron las numerosas muertos en dos zonas diferentes del Líbano.
Tras estos ataques, Israel también decidió iniciar una incursión militar, este 30 de septiembre. Medios y agencias de información internacionales reportaron que a 3.2 kilómetros de la frontera libanesa, soldados del Ejército de Israel ingresaron por el sur del Líbano y “están por todas partes”.
También indicaron que los soldados de israelís han bloqueado un área en el noreste de Israel, la más cercana a la frontera libanesa, declarándola una "zona militar cerrada".
Asimismo, se mencionó que cerca de la carretera que conduce a una zona militar cerrada, llegaron aproximadamente 100 tanques y otros vehículos militares, los cuales están estacionados en un campo.
Por su parte, el Ejército libanés evacuó puestos de observación en la frontera sur de Líbano con Israel y se trasladó a cuarteles en las aldeas fronterizas. El ministro de Defensa de Israel, Yoav Gallant, dijo previamente a los jefes de los Consejos Regionales en el norte de Israel que la "próxima etapa" de la guerra de Israel contra Hezbollah "comenzará pronto".
Esto ocurre después de que el Ejército israelí declarara una zona militar cerrada alrededor de tres pueblos en el extremo norte de su frontera con Líbano.