Por Hugo Rangel Vargas
https://www.sprinforma.mx/noticia/estados-unidos-en-crisis
6 min El pasado 8 de mayo, un latino residente en los Estados Unidos, de nombre Mauricio García de 33 años, presuntamente fue el ejecutor de un ataque con un arma de fuego en contra de personas que se encontraban en un centro comercial de Allen, en el estado de Texas. El crimen, que hasta el momento ha cobrado la vida de al menos ocho personas y ha dejado siete heridos, ha llevado al presidente de los Estados Unidos, Joe Biden, a declarar luto nacional.
La vecina nación del norte se ha resistido a reformar su marco legal que ampara a los civiles, a través de la llamada segunda enmienda, a portar armas. Este marco legal es una coladera perfecta que data de 1791 y por la que la industria bélica de ese país logró en 2022 una producción equivalente a 19.5 mil millones de dólares, haciendo además que Estados Unidos sea el principal exportador de armas del planeta.
La ceguera norteamericana tiene en vilo a la paz en su propio territorio y en lo que va del año 2023 ya se acumulan 199 tiroteos masivos, cifra que está superando a los registros históricos de las últimas décadas en aquel país, el cual es el único en el mundo en el que hay más armas en manos de civiles que personas, teniendo una tasa de 120 artefactos de fuego por cada 100 habitantes.
La añeja cultura de la posesión de armas en Estados Unidos se entremezcla peligrosamente con el resurgimiento de expresiones de odio y racismo, con el agregado de que, en el caso sucedido en Allen, el agresor inexplicablemente era un latino que portaba símbolos neonazis en su vestimenta y que había expresado en sus redes sociales mensajes afines al discurso de encono del supremacismo blanco.
“Nosotros, el Pueblo de los Estados Unidos, a fin de formar una Unión más perfecta, establecer Justicia, afirmar la tranquilidad interior…” así reza el acta fundacional de la vecina nación que hoy atraviesa por una penosa crisis que compromete la consecución de eso a lo aspira. La anchura de su territorio, la vastedad de sus orígenes, el aplomo y el arrojo de sus habitantes; parecen diluirse en la amenaza de una conflagración social en la que el primer sacrificado ha sido la capacidad de asombro.
La magnitud de la crisis social que ha traído la proclividad armamentista de los Estados Unidos podría colocar también en aprietos a las propias instituciones de esta democracia que deslumbró a pensadores como Alexis de Tocqueville. El retorno al estado de naturaleza que describiría Thomas Hobbes es un fantasma que se cierne sobre una sociedad que parece ya no tener un poder común que atemorice a sus individuos.
La semana pasada, nuestra Ciudad rompió el récord del día más caluroso en su Historia; es la primera vez que el calentamiento global es palpable en mi vida cotidiana.
Hernán Gómez pone en evidencia que el negocio de la administración de justicia judicial es mucho peor de lo que se piensa en la discusión pública reciente.
La sucesión presidencial de 1976 marcó el inicio del fin de un modelo que prevaleció en México por casi 50 años donde una fuerza partidaria amparada por el poder del Estado ganaba toda elección.
La politización de la justicia no solo erosiona la confianza en el sistema judicial, sino que también distorsiona el propósito fundamental de este: “proteger los derechos y las libertades".