El presidente de El Salvador, Nayib Bukele, ordenó al jefe de la División Élite Contra el Crimen Organizado (DECO) de su gobierno, Raúl Eduardo Reyes Escuintla, que recapturara al líder de la pandilla Marasalvatrucha-13, Élmer Canales Rivera, alias “Crook”, y para ello el agente aceptó negociar con miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y estuvo dispuesto a ofrecer un millón de dólares al cártel mexicano para que llevaran a cabo la captura del líder pandillero en territorio mexicano.
De acuerdo con una investigación del medio de comunicación salvadoreño radicado en Costa Rica, El Faro, tras la orden de Bukele de recapturar a “Crook” –quien había sido liberado por el propio gobierno de Nayib Bukele en 2021–, el mandatario salvadoreño ordenó a Raúl Eduardo Reyes Escuintla que se recapturara a “Crook” antes de las elecciones del próximo 4 de febrero.
El titular de la DECO, para llevar a cabo la operación, se intentó reunir con diversos traficantes de personas para dar con el paradero de Crook, pero no tuvo éxito. Posteriormente contactó a Rafael Eduardo J, alias “Rafa” o “Chafa”, líder de la pandilla Barrio 18 (contraria a la Marasalvatrucha-13), prófugo de la justicia desde 2016 y quien migró fuera de El Salvador cuando comenzó el régimen de excepción de Bukele en enero de 2023.
De acuerdo con las conversaciones a las que tuvo acceso El Faro, “Rafa” le aseguró a Escuintla que él podría dar con “Crook”, a cambio de que liberaran a su hermana que estaba presa. El titular de la DECO logró la liberación de la hermana de “Rafa” el 22 de abril de 2023 y tras ello el líder de Barrio 18 se ofreció para contactarse con miembros del CJNG para que le entregaran a Crook.
Para hacer las gestiones, “Rafa” pidió 6 mil 500 dólares para viáticos de movilidad, comunicación y para que el cártel mexicano hiciera el trabajo; el inspector Escuintla aceptó entregar 4 mil dólares en efectivo para que hiciera la operación.
Sin embargo, todo se trató de una estafa, según la investigación de El Faro. “Rafa” nunca estuvo en contacto con su pandilla, ni entabló conversaciones con el CJNG. Durante diez meses, habló con el inspector Escuintla dándole largas sobre una posible reunión con el cártel mexicano y logró la liberación de su hermana.
En cambio, “Rafa” entró en contacto con periodistas de El Faro y con autoridades estadounidenses. Finalmente, autoridades mexicanas en coordinación con el FBI capturaron a Crook en Chiapas, México, el 8 de noviembre. Ese mismo día “Rafa” sacó a su hermana de El Salvador y ambos entraron al programa de testigos protegidos de Estados Unidos.