Los mandatarios de Rusia, Vladimir Putin, y de China, Xi Jinping, sostuvieron una reunión en el marco de la Cumbre de los BRICS, un grupo y foro político de alto nivel y económico conformado por Brasil, Rusia, China, India y Sudáfrica; donde aprovecharon para ratificar la solidez de la relación bilateral y destacar la manera en la que se ha conformado esta.
Por su parte, el presidente de China aseguró que pese a la situación de cambios profundos que está atravesando el mundo, la “profunda amistad que une a China y a Rusia de generación en generación no cambiará”.
Por su parte, Putin instó a su homólogo chino a reforzar su vínculo diplomático debido a su importancia como factor de estabilidad mundial.
La Cumbre de las BRICS se lleva a cabo en Kazán, donde el presidente de Rusia también afirmó que tanto su país como China han logrado llevar la paz a la región gracias a los proyectos en conjunto que llevan a cabo en materia de transporte, energía y agricultura, entre otros.
Durante julio de este 2024, los Estados miembros de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) acusaron a China de convertirse en “un facilitador decisivo de la guerra de Rusia contra Ucrania” y de “plantear desafíos sistémicos a la seguridad euroatlántica”.
Los mandatarios de los países miembro apuntaron que el papel de China ha aumentado “la amenaza que Rusia plantea para sus vecinos y a la seguridad euroatlántica”, por lo instaron a dicha nación a “cumplir su compromiso de actuar responsablemente en el ciberespacio”.
“Estamos decididos a limitar y contrarrestar las acciones agresivas de Rusia y a contrarrestar su capacidad de llevar a cabo actividades desestabilizadoras contra la OTAN y sus aliados. Para nuestra próxima Cumbre, elaboraremos recomendaciones sobre el enfoque estratégico de la OTAN respecto de Rusia, teniendo en cuenta el cambiante entorno de seguridad”.
Esta declaración sin duda muestra la preocupación de Occidente ante la escalada del apoyo militar de China a Rusia; en septiembre de este año, las Fuerzas Armadas rusas iniciaron maniobras en todo el mundo, con más de 90 mil soldados y 500 barcos y aviones.
Estas movilizaciones se realizaron durante 7 días, que fueron conocidos como los “Ocean-2024” y son la mayor muestra de la fraternidad militar que existe entre ambos países de la última década.