Después de que el presidente de Siria, Bashar al Assad, abandonó el país luego de que fuerzas insurgentes islamistas lograron entrar a la capital, Damasco, gobiernos y líderes del mundo se pronunciaron ante los hechos.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, aseguró que "por fin el régimen de Assad ha caído", en referencia a la toma de Damasco por los rebeldes islamistas y la salida del presidente de #Siria. “Después de 13 años de guerra civil en Siria, más de medio siglo de brutal gobierno autoritario por parte de Bashar al Assad y su padre antes de él, las fuerzas rebeldes han obligado a Assad a renunciar a su cargo y huir del país."
Por su parte el presidente electo estadounidense, Donald Trump, declaro en días previos que su país no debía involucrarse militarmente en los conflictos de Siria, “Esta no es nuestra lucha” declaró. Cabe recordar que durante su visita a París para asistir a la reinauguración de la catedral de Notre Dame, Trump declaró que el presidente de Siria “no merecía” el apoyo de Estados Unidos para mantenerse en el poder.
El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, emitió un mensaje tras la toma de la capital de #Siria por rebeldes islamistas, calificando el hecho como un día histórico para el Medio Oriente.
"El derrumbe del régimen de Asad, la tiranía de Damasco ofrece una gran oportunidad, pero también implica importantes peligros", añadió.
Por otro lado, el presidente de Francia, Emmanuel Macron, declaró que "el Estado bárbaro ha caído", refiriéndose a la toma de Damasco por los rebeldes islamistas y la salida del presidente de Siria, Bashar al Asad. Además, expresó su deseo de paz, libertad y unidad para Siria "en este momento de incertidumbre", y reafirmó el compromiso de Francia con la seguridad y estabilidad en toda la región de Oriente Medio.
En cuanto a Irán, el ministerio de Relaciones Exteriores reafirmó su compromiso de respetar la unidad, soberanía e integridad territorial de Siria. En un comunicado, destacó que el destino de Siria debe ser decidido por su pueblo, sin interferencias externas, y enfatizó la necesidad de cesar los conflictos, prevenir el terrorismo e iniciar diálogos nacionales inclusivos.
La Organización de las Naciones Unidas (ONU) calificó este domingo la caída del régimen de Bashar al Asad como "un histórico nuevo comienzo para un pueblo que ha sufrido 14 años de atrocidades" y lo consideró una oportunidad para que se dé paso a una era más respetuosa con los derechos humanos en el país.