Miles de israelíes continúan manifestándose contra la Reforma Judicial impulsada por el primer ministro, Benjamín Netanyahu, la cual será debatida y votada por el Parlamento en las próximas horas, se podría volver ley la tarde de este lunes 24 de junio.
El pasado 20 de julio, Netanyahu se dirigió a sus ciudadanos para hablar de la reforma, afirmó que el consenso entre partes “está en marcha”, y que su objetivo es reducir la jurisdicción de la Suprema Corte sobre las decisiones del Poder Legislativo.
Por un lado, el primer ministro y sus aliados defienden a la reforma como necesaria para equilibrar la relación entre poderes, sin embargo, los manifestantes la condenan como algo que terminaría con la independencia del Poder Judicial.
Los manifestantes, que ya cumplen más de diez semanas de haber iniciado, han hecho presencia en diversas partes del país, sin embargo, los últimos días se han dirigido a Jerusalén bajo la consigna de defender a la Corte, los protestantes planean colocarse en las afueras del Parlamento antes de que se dé el debate de la reforma.
Reservistas del ejército israelí han declarado que se negarán a prestar servicio en caso de que la reforma se materialice, cuestión que preocupa a activistas y críticos, por lo que el primer ministro afirmó que “no tolerará” que los reservistas se nieguen a presentarse en su servicio debido a que esto amenazaría la seguridad de todo el país.
En todo el mundo se ha manifestado la preocupación por la reforma israelí, el primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, criticó el proyecto de Netanyahu y aseguró que una visita del mandatario de Israel “no está en sus planes por el momento”.
Israel enfrenta las manifestaciones más masivas en su historia, y podrían agravarse en caso de que se apruebe la reforma, incluso en los últimos días ciudadanos han culpado al Gobierno de reprimir sus movimientos de manera violenta.