Pese al hackeo que se dio en el mes de septiembre a la Secretaría de la Defensa Nacional, el laboratorio Citizen Lab aceptó no poder comprobar el origen del presunto espionaje llevado a cabo con el software Pegasus perpetrado supuestamente contra periodistas y activistas.
El análisis técnico forense del laboratorio dependiente de la Universidad de Toronto, Canadá, no detalla ni sugiere que el espionaje haya sido llevado a cabo por la Sedena.
Además, Citizen Lab detalló que no cuenta con pruebas que puedan vincular el presunto hackeo de personas señalado por medios a ningún cliente específico de la empresa israelí desarrolladora de software, NSO Group.
“Evaluamos con alta confianza que estas personas fueron hackeadas con el software espía Pegasus. En este momento, los datos técnicos disponibles para estos casos recientes (2019-2021) no nos permiten atribuir el hackeo a un cliente de NSO Group en particular. Sin embargo, cada una de las víctimas sería de gran interés para las entidades dentro del gobierno mexicano y, en algunos casos, preocupantemente, para los cárteles”, así lo detalló el laboratorio en su reporte disponible en su página.
Este hecho se suma a lo reportado por Infodemia Mx, quien desmintió el presunto espionaje por parte de la Sedena, ya que como lo mencionan, “la SEDENA adquirió el “servicio de monitoreo remoto de información”, quienes publicaron estos documentos filtrados por Guacamaya (grupo hacktivista) no prueban que la Secretaría de la Defensa Nacional contrató pegasus y tampoco prueban que fue este cuerpo de seguridad quien instaló el software en los periodistas y activistas que lo denunciaron”.