Revela GIEI VI y último Informe sobre la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa

El Grupo Interdisciplinario de Expertos Independiente, el GIEI, presentó hoy su VI y último Informe sobre el caso Ayotzinapa. Después de ocho años y cuatro meses que asumieron el apoyo técnico para el esclarecimiento de los hechos detrás de la desaparición de 43 estudiantes y tres asesinados en Iguala, Guerrero, el 26 de septiembre de 2014, hoy, martes 25 de julio anunciaron que se retiran de la investigación y que no buscarán ampliar el plazo de su gestión.

El VI informe muestra la implicación de los grupos criminales y de los agentes estatales en la desaparición de los normalistas, así como del Ejército y la Secretaría de Marina (Semar).  

Dentro de los hallazgos que destacó el GIEI se encuentran los actos que realizó el Centro de Investigación y Seguridad Nacional (CISEN) durante el interrogatorio y detención de los normalistas. 

A través de un reporte oficial de carácter reservado, el grupo de expertos identificó el fallecimiento de al menos, dos personas, a raíz de a un operativo de inteligencia a cargo del CISEN.

Aunado a ello se suman las contradicciones en los documentos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) sobre la localización del cuerpo del normalista Julio César Mondragón.

También, destacaron el uso de la tortura durante las detenciones por parte de la Marina a través de la cual, obtuvieron declaraciones que crearon junto a la extinta Procuraduría General de la República (PGR), la llamada verdad histórica.

Entre las fallas del caso, los expertos señalaron la fragmentación judicial, ya que existen 60 investigaciones judiciales abiertas, aunque debería ser una causa unificada.

Otro de los elementos que destacaron los expertos del GIEI para comprender las condiciones que posibilitaron la desaparición fue la colusión con el narcotráfico y la delincuencia organizada con mandos y miembros del Ejército y la visión contra insurgente que tenían de los jóvenes, "Hay muchos documentos de Sedena que los señala de ser parte de la guerrilla. Eso los estigmatiza, es una marca moral negativa, así que da igual lo que les pase".

Los especialistas Ángela María Buitrago y Carlos Beristain agregaron que a pesar de la voluntad política mostrada en la actual administración, existen múltiples obstáculos que les impiden continuar su apoyo técnico para el esclarecimiento de los hechos, como por ejemplo, la falta de respuesta de la Sedena y otras instituciones a informaciones adicionales solicitadas y aseguraron que esto debe producir un cuestionamiento del estado y la sociedad ya que, “para que haya justicia, primero tiene que haber verdad”.

"El riesgo es que la mentira se institucionalice como respuesta, lo que es inaceptable, duele investigar en estas condiciones en que la asistencia técnica se vuelve una carrera de obstáculos" afirmó Carlos Beristain, miembro del GIEI.

Ángela María Buitrago concluyó diciendo que: "Quienes hemos trabajado en el caso y con las familias reconocemos su enorme coraje y cómo han hecho que el amor por sus hijos, que nos ha traído hasta aquí, sea también parte de una conciencia, en México y en el mundo, de los derechos humanos y la búsqueda de los desaparecidos. Gracias, mamás, papás, familias”.