El jefe de Asuntos Humanitarios de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Tom Fletcher, calificó como “una gota en el océano” la entrada de una cantidad limitada de camiones con alimento a la Franja de Gaza, además, la Organización Mundial de la Salud (OMS) informó que podrían morir 2.1 millones de personas por hambruna, tras casi dos meses de bloqueo por parte del ejército israelí.
Asimismo, la OMS advirtió casi medio millón de gazatíes se encuentran en “una situación catastrófica de hambre, desnutrición aguda, inanición, enfermedad y muerte” y destacó que las mujeres embarazadas y lactantes, así como las niñas y niños, son sectores en mayor riesgo.
La organización detalló que, desde que inició el bloqueo el pasado 2 de marzo, han muerto 57 niños por desnutrición y que, si la situación persiste, se prevé que casi 71 mil niños menores de 5 años sufran desnutrición aguda en los próximos 11 meses.
En ese sentido, una evaluación de la Clasificación Integrada de Fases de Seguridad Alimentaria, respaldada por la ONU, reveló que el 93% de niños en Gaza están al borde de la hambruna, lo que equivale a alrededor de 930 mil infantes.
La OMS afirmó que “el impacto y los daños a largo plazo de la desnutrición pueden durar toda la vida, en forma de retraso en el crecimiento, deterioro del desarrollo cognitivo y mala salud”, esto, aunque la ayuda fuera suficiente, debido a los estragos que ya se han causado en la población en los últimos meses.
Al respecto, el primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, aseguró que su decisión de permitir el paso limitado de ayuda humanitaria está relacionada con la presión de sus aliados, así como con su intención de prolongar su control sobre la región, en donde la cantidad de muertes ya supera las 60 mil, de acuerdo con el Ministerio de Salud gazatí.