Se llevó a cabo la segunda marcha en contra de la reforma al INE

Este domingo se llevó a cabo en el Zócalo la segunda marcha contra la reforma al Instituto Nacional Electoral (INE), el Plan B, donde se dieron cita, de acuerdo con datos del C5 de la Ciudad de México, más de 100 mil ciudadanos y políticos de la oposición como Sandra Cuevas, alcaldesa de Cuauhtémoc, en la CDMX, Santiago Creel, exsecretario de Gobernación y actual presidente de la mesa directiva de la Cámara de Diputados, Marko Cortés, presidente nacional del Partido Acción Nacional (PAN), las senadoras panistas Xóchitl Gálvez y Josefina Vázquez Mota, la alcaldesa de Álvaro Obregón, Lía Limón, entre otros.

Los asistentes comenzaron a conglomerarse en la plancha del Zócalo alrededor de las 9:30 horas, donde uno de los eventos más representativos fue cuando los primeros manifestantes arrancaron, entre aplausos, una manta con la leyenda “García Luna no se toca” y el logo del PAN en la Plaza de la Constitución.

Por su parte, el exministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), José Ramón Cossío, proclamó un discurso en la Plaza de la Constitución en el que resaltó los objetivos de la manifestación y agradeció a los asistentes su presencia, dentro de su declaración resaltó el mensaje de que solo los ministros pueden defender los “privilegios” del crimen debilitando las instituciones electorales.

La exdiputada Beatriz Pagés también tomó el micrófono para dirigirse a los asistentes, donde señaló al presidente Andrés Manuel López Obrador de supuestamente usar al INE para llegar al poder y ahora querer destruirlo.

Los miles de manifestantes que se dieron cita en el Zócalo capitalino comenzaron a dispersarse por las calles aledañas alrededor de las 12:30 horas, la breve concentración terminó con la entonación del himno nacional por los asistentes.

La otra cara de la marcha

Por su parte, el presidente nacional de Morena, Mario Delgado, aseguró que la manifestación fue una “farsa”, mencionó que quienes encabezan y convocaron la protesta contra la reforma quieren “regresar al pasado”, haciendo referencia al pasado corrupto.

Este movimiento, esta protesta tiene como pantalla lo del “Plan B” de la reforma electoral, pero lo cierto es que no es una marcha la ciudadanía. Es una manifestación de la derecha en contra de la transformación que se está viviendo a nivel nacional", mencionó Delgado.

A unos minutos del inició de la marcha, que se convocó para las 11:00 horas, el Zócalo no vislumbraba una participación importante, sin embargo, medios reportan que, tras la llegada de más de 250 camiones de pasajeros, fue que se llenó la plaza.

La agrupación de camiones fue vista estacionada en diversas calles y avenidas aledañas al Zócalo, en la glorieta Simón Bolívar, sobre Paseo de la Reforma, la dirección al norte de la ciudad se convirtió en un estacionamiento de camiones de pasajeros que transportaban a grupos de personas que se unieron a la movilización.

De acuerdo con El Universal, un elemento de tránsito de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) informó que el número de camiones que arribaron al centro de la CDMX fue de al menos 250, los cuales se detuvieron para bajar a los participantes, en su mayoría con ropa y gorras color blanco y rosa. 

El elemento también mencionó que los camiones reportaron que venían de la Alcaldía Álvaro Obregón y que las personas de los descendieron con un “lunch” en la mano y una playera para apoyar al INE.