Las tres mujeres candidatas a ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y que integran la terna para sustituir al ministro de la Corte, Arturo Zaldívar, comparecieron ante el pleno del Senado de la República este 29 de noviembre.
Tras la comparecencia de las tres candidatas, Bertha Alcalde Luján, Lenia Batres Guadarrama y María Estela Ríos González; el Senado aprobó el dictamen para que de dicha terna se elija a la próxima ministra de la SCJN,
La primera en comparecer fue Bertha Alcalde Luján. La aspirante a ministra explicó que el país exige una justicia más humana, una justicia moderna y transformadora que edifique nuevos paradigmas para colocarla al servicio del pueblo. Y enfatizó que “para que nadie se quede afuera y nadie se quede atrás”.
Alcalde Luján, también detalló que las y los mexicanos no conocen sus medios de defensa legal y no tienen condiciones para acceder a la justica, por lo que la Suprema Corte de Justicia tiene la posibilidad de incidir ante esta realidad.
Asimismo, explicó que es la máxima instancia para resolver conflictos entre poderes y ciudadanos por lo que su máxima responsabilidad es la de generar paz y estabilidad en México.
Por su parte, Lenia Batres Guadarrama enfatizó que no cabe duda de que los tiempos están cambiando, pues en esta ocasión una mujer sustituirá a un hombre en el cargo de magistrado de la SCJN, la cual se convertirá en la décimo quinta mujer en ocupar el puesto de ministra, en los 200 años de historia que tiene la SCJN.
De acuerdo con Batres Guadarrama, al designarse a una mujer como ministra de la SCJN se estará dando cumplimiento al mandato aprobado por el constituyente permanente en 2019 en el sentido de que, en la integración de los órganos jurisdiccionales, también se debe de observar el principio de paridad de género.
La candidata señaló que hay temas que considera importantes y que planteó anteriormente ante la Comisión de Justicia del Senado, los cuales son: “la revolución de los derechos que vivimos actualmente, que ha incorporado derechos sociales a la cabeza de la indispensable efectividad del ejercicio de derechos que debe garantizar un Estado democrático actual. Y la necesidad de encausar, legal y constitucionalmente, la actuación de la SCJN y la urgencia de democratizar al Poder Judicial en su integración y en sus resoluciones”.
Sobre la elección de jueces, magistrados y ministros, a través del voto popular, la candidata indicó que hay países como Bolivia y Suiza, en los cuales las personas juzgadoras son elegidas por el sufragio universal. También ejemplificó el caso de Chile, donde se conforman tribunales con personas provenientes del Poder Judicial, como de personas ajenas a este poder.
Por su parte, María Estela Ríos González, tercera aspirante a ocupar el lugar vacante en la Corte, señaló la necesidad de privilegiar modelos alternativos para la resolución de conflictos judiciales; destacando la conciliación y la justicia restaurativa.
Adicionalmente, Ríos González expuso ante el pleno de la Cámara Alta la importancia de integrar la realidad política, económica y social del país en las resoluciones del máximo órgano judicial:
“Me importa mucho que las resoluciones que se dicten en la Suprema Corte deban hacerse tomando en cuenta la realidad política, económica y social (…) para que esos valiosos principios que emanan de los mandatos constitucionales realmente se hagan efectivos”, manifestó la aspirante a ministra.
Proceso de elección de la próxima ministra de la SCJN
Al cierre de estas tres exposiciones, los senadores emitirán su voto por medio de una cédula. Cada legislador colocará su voto dentro de una urna, si alguna de las aspirantes obtiene el apoyo de al menos dos terceras partes del pleno, será elegida ministra de la Suprema Corte por un periodo de 15 años.
En caso de no obtener la mayoría calificada, el proceso se repetirá de forma inmediata sin debates o intervenciones. De no obtener los votos necesarios en una nueva votación, el presidente de la República deberá enviar una nueva terna con perfiles diferentes para repetir el proceso legislativo.
Si con esa nueva terna no se lograra un consenso, entonces el jefe del Ejecutivo podrá elegir directamente a quien sustituya el puesto, dejado tras la renuncia del ministro Arturo Zaldívar Lelo de Larrea.