La presidenta Claudia Sheinbaum celebró este 31 de octubre el “primer paso” del Gobierno de España hacia “lamentar la injusticia” cometida en contra de los pueblos originarios del territorio nacional durante la Conquista de México.
En la Mañanera del Pueblo, Sheinbaum destacó que el ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares Bueno, brindó un discurso en el que aseguró que es pertinente “lamentar las injusticias” a las comunidades originarias de los españoles tras su arribo a nuestro continente en 1521 y afirmó que se trata de “un primer paso y habla de la importancia de lo que siempre hemos dicho: el perdón engrandece a los gobiernos y a los pueblos”.
“No es humillante, al contrario. Reconocer la historia, reconocer los agravios, pedir perdón o lamentar y recuperarlo como parte de la historia engrandece a los gobiernos y a los pueblos. Así que enhorabuena por este primer paso del canciller del Gobierno español en el reconocimiento particularmente en este Año de la Mujer Indígena”, señaló.
El discurso de Albares Bueno tuvo lugar durante la inauguración de la exposición "La mujer en el México Indígena" en el Museo Arqueológico Nacional, en Madrid, la cual, aseguró Sheinbaum, es un esfuerzo por “hacer visible la grandeza de México en España”. En su intervención, el funcionario apuntó sobre la estrecha relación entre ambos países y expresó que la historia compartida es “muy humana, y como toda historia humana, de claroscuros, y también ha habido dolor, dolor e injusticia hacia los pueblos originarios a los que se dedica esta exposición. Hubo injustica, justo es reconocerlo hoy y justo es lamentarlo, porque esa es también parte de nuestra historia compartida y no podemos ni negarla ni olvidarla".
Además, reconoció “la acogida del pueblo mexicano y del Gobierno de Lázaro Cárdenas a los exiliados españoles”.
La presidenta también adelantó que como parte de esta exhibición se realizará el libro “Mujeres del maíz y del cosmos: arte indígena de antes y de ahora” y compartió el prólogo que escribió para el ejemplar:
"México es tierra de raíces profundas. Su grandeza cultural no se explica sin las civilizaciones originarias que florecieron mucho antes de la llegada europea, y sin las mujeres que dieron forma a esas culturas: tejedoras de símbolos, sabidurías y realidades. Esta exposición reúne el arte de mujeres indígenas de ayer y de hoy: gobernantas, artesanas, diosas, creadoras, guardianas del maíz, de la palabra, la memoria y la grandeza.
Desde hace milenios, estas mujeres han tejido su visión del mundo en lienzos, cerámicas, códices, bordados, cantos y palabras. Hablan 68 lenguas vivas, hijas de cientos de generaciones que entendieron el cosmos como un todo interconectado. En su arte está el equilibrio entre lo humano y lo divino, la vida y la muerte, la tierra y el agua, lo visible y lo invisible [...]
Honrar este legado implica reconocer los abusos del pasado y del presente. La discriminación, el racismo y el desprecio hacia los pueblos originarios aún persisten. Erradicarlos es un deber ético si aspiramos a un mundo verdaderamente justo, donde todas las culturas, todas las lenguas, todas las personas tengan el mismo valor.
El mundo es un crisol de historias, colores y voces. Nadie está por encima de nadie. Esta exposición es un puente de respeto, diálogo y debe ser también de reconocimiento. Que sirva para mirar con otros ojos, escuchar con otros oídos, y sentir con el corazón abierto".
Finalmente, la presidenta se refirió a la su toma de protesta como titular del Ejecutivo, suceso al cual no invitó al Rey de España, Felipe VI, debido a la carta enviada por su predecesor Andrés Manuel López Obrador para solicitarte que pidiera perdón por los agravios del pasado en 2021.
Aseguró que tomó esa decisión por convicción y explicó que la no respuesta a la carta fue “un agravio para el pueblo de México”.