A las 00:23 (hora de Malta, GMT +2) del 2 de mayo de 2025, el buque Conscience, perteneciente a la Freedom Flotilla Coalition, fue atacado por drones mientras se encontraba en aguas internacionales cerca de Malta, en navegación rumbo a la Franja de Gaza. Los drones atacaron en dos ocasiones la proa del barco, generando un incendio y el deterioro de una parte del casco. El barco estaba tripulado por activistas provenientes principalmente de Turquía y Azerbaiyán y transportaba ayuda humanitaria para la población gazatí. El capitán de la tripulación ha denunciado actos de intimidación por parte del gobierno de su país, Azerbaiyán; así como inacción por parte del gobierno de Malta. Este evento se suma a la estrategia sistemática de intimidación por parte del gobierno de Israel, presidido por Benjamin Netanyahu y una coalición de ultraderecha, contra los intentos de activistas de todo el mundo por proveer ayuda humanitaria a la Franja de Gaza y romper el bloqueo inhumano que sufre la población. En los últimos dos meses, ha aumentado la violencia por parte de Israel contra cualquier intento de llevar ayuda humanitaria a Gaza, llegando incluso a atacar a civiles desarmados en varias ocasiones.
La Freedom Flotilla Coalition es un movimiento de solidaridad internacional de base que surgió en 2010 y agrupa a organizaciones como Canadian Boat to Gaza, Freedom Flotilla Italia, el Comité Internacional para Romper el Asedio de Gaza, entre otras. Sus objetivos son: Romper el bloqueo ilegal impuesto por Israel sobre Gaza, concientizar a la población mundial sobre las consecuencias del bloqueo, denunciar la complicidad de gobiernos y actores globales, y dar una respuesta solidaria a la causa palestina. En una entrevista realizada por Diana Carolina Alfonso y Alejandra Cedano, Thiago Ávila, coordinador de la Freedom Flotilla Coalition, señaló que, desde 2010, la organización ha sufrido múltiples ataques. Ávila indicó que solo 5 de las 36 flotillas han logrado llegar a su destino debido a sabotajes como "guerra burocrática, interceptaciones, toma de control de los barcos y secuestro de personas" (Diario Red, 2025).
Es importante recordar que desde octubre de 2023, Israel ha intensificado su política genocida contra el pueblo palestino y, en los últimos dos meses, ha cerrado por completo el acceso de ayuda humanitaria a Gaza, provocando una grave escasez de alimentos, agua potable y medicamentos. La ONU, a través de la Oficina para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA), ha reportado que el brutal bloqueo mantiene a la población gazatí en un estado de hambre, incertidumbre y desesperación. Olga Cherevko, portavoz de OCHA, declaró: Las reservas de alimentos están casi agotadas y el acceso al agua es imposible". Israel ha llevado a cabo un genocidio en Gaza: para abril de 2025, más de 50.000 palestinos habían sido asesinados (más de 15.000 eran menores de edad), y más de 115.000 personas resultaron heridas. Además, según la ONU, las fuerzas israelíes han asesinado a 412 trabajadores humanitarios, incluidos miembros de la Media Luna Roja, la Defensa Civil Palestina y la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo. Expertos estiman que en la actualidad Gaza necesita 600 camiones diarios de ayuda humanitaria para cubrir sus necesidades básicas, pero desde el 2 de marzo de 2025, Israel no ha permitido la entrada de ningún convoy.
El ataque al Conscience representa una violación flagrante del Derecho Internacional Público y el Derecho Humanitario, así como un ataque a la soberanía europea. El silencio de los gobiernos europeos ante este hecho podrá ser juzgado en el futuro como un acto de complicidad que permitió la operación de drones en territorio continental y contribuyó a la criminalización de la ayuda humanitaria. Por otro lado, los líderes progresistas de América Latina han apoyado la ayuda humanitaria y a los activistas de la Freedom Flotilla Coalition. Gustavo Petro, presidente de la República de Colombia, escribió en X: "La solidaridad es la máxima expresión del ser humano". Mientras que el ex presidente de Bolivia, Evo Morales, añadió: "No podemos ser cómplices del silencio que permite el genocidio más grande de la historia moderna".