La unión internacional Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica (BRICS) se reunieron este martes en la edición XV de la cumbre BRICS llevada a cabo en la ciudad de Johannesburgo, en Sudáfrica, para hablar sobre la integración de nuevos miembros, la descentralización de las economías del dólar y sobre la agenda internacional para intensificar el peso de esta alianza en el mundo.
Lula da Silva, presidente de Brasil; Cyril Ramaphosa, presidente de Sudáfrica; Subrahmanyam Jaishankar, ministro de Exteriores de India; , Ma Zhaoxuuso, viceministro chino de Relaciones Exteriores; y Serguéi Lavrov, el ministro de Exteriores de Rusia se reunieron este martes en el primer día de la cumbre del BRICS, la cual se fundó en 2009 uniendo a las mayores economías mundiales en desarrollo que actualmente representan el 23% de la economía mundial, 42% de la población, 29% del territorio y más del 16% de comercio global. Su objetivo es abrir el panorama mundial y hacer contrapeso a las potencias y economías de occidente.
El mandatario ruso, Vladimir Putin, no pudo asistir debido a que, de haberse presentado, las autoridades sudafricanas tendrían el deber de arrestarlo ya que Sudáfrica es miembro de la Corte penal Internacional (CPI) y el líder ruso tiene un mandato de arresto por esta organización. Sin embargo, Putin fue bienvenido en la cumbre y participó desde Rusia de manera virtual y declaró que: "Cooperamos sobre los principios de igualdad y respeto por los intereses de cada uno, y esta es la esencia del rumbo estratégico orientado al futuro que tiene nuestra asociación, un rumbo que responde a las aspiraciones de la mayor parte de la comunidad mundial, la llamada mayoría global".
Por su parte, el ministro de Exteriores de India reafirmó los objetivos de un “reequilibrio mundial” en su discurso de apertura: "Nuestra reunión debe enviar un mensaje firme de que el mundo es multipolar, que se está reequilibrando y que las viejas formas no pueden hacer frente a las nuevas situaciones”.
De igual forma, se habló sobre el fortalecimiento del Nuevo Banco de Desarrollo (NBD), el cual fue fundado en el 2015, también conocido como Banco BRICS, para poder alejarse de la dependencia del dólar estadounidense y dar paso al uso de otra divisa para el comercio internacional.
Otro tema central de la cumbre BRICS fue la incorporación de nuevos miembros, de lo cual anunciaron que en esta edición no se incorporarán nuevos países a la asociación, pero que sí se piensan anexar a nuevos miembros próximamente. El viceministro chino de Relaciones Exteriores comentó al respecto: "Esperamos que más países se unan a nuestra gran familia".
Al menos 40 países han mostrado su interés en unirse, de los cuales 28 han presentado formalmente su solicitud de adhesión, entre los que destacan Argentina, Arabia Saudí y Argelia.
Por su parte, México dejó clara su postura de no participar en la unión. El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador,
indicó en la rueda de prensa del 8 de agosto: “Nosotros no vamos a participar en este bloque, en esta asociación. Desde luego, celebramos que lo hagan otros países. Sin embargo, por razones económicas, de vecindad, de geopolítica, nosotros vamos a continuar fortaleciendo la alianza de América del Norte y de toda América”, por lo que se descarta la posibilidad de adhesión de México al BRICS.