La presidenta Claudia Sheinbaum encabezó un encuentro con la comunidad p’urhépecha donde pusoen marcha, este sábado 5 de abril, el Plan de Justicia del Pueblo P’urhépecha, así como el Programa Nacional de Estufas Eficientes y Seguras para Hogares que Cocinan con Leña, una iniciativa de justicia social, energética y ambiental que busca dignificar la vida de las comunidades originarias del país.
Vestida con un traje típico y tras participar en una ceremonia tradicional, Sheinbaum fue nombrada “Nana Claudia” por el pueblo p’urhépecha, un título que significa “madre” y que, de acuerdo con el gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, representa un profundo acto de amor y reconocimiento. Solo dos figuras históricas habían recibido antes un nombramiento similar: Vasco de Quiroga y Lázaro Cárdenas del Río.
La mandataria recordó con emoción su primera visita a Cherán Atzicuirín hace 42 años, cuando llegó como estudiante de la UNAM a trabajar en un proyecto de estufas de leña eficientes. “En mi caso, no sería lo que soy si no fuera gracias al pueblo p’urhépecha y lo que aprendí en estas tierras. La fuerza de México viene del México profundo, del México indígena”, expresó.
El nuevo Plan de Justicia, dijo, representa devolver al pueblo p’urhépecha lo que durante décadas les fue arrebatado: educación, salud, vivienda, apoyo al campo, seguridad, infraestructura, así como la revitalización de su lengua y cultura. “Este Plan significa hacer justicia junto con ustedes”, afirmó Sheinbaum.
En ese marco, se dio inicio también al Programa Parhánkua, que incluye una inversión inicial de 500 millones de pesos para distribuir 16 mil 500 estufas eficientes en comunidades del pueblo p’urhépecha, con una meta nacional de un millón de estufas. Este programa reducirá hasta en un 50% el humo de la leña en interiores, cuidará la salud –especialmente de mujeres y niñas– y protegerá los bosques sagrados.
Luz Elena González Escobar, secretaria de Energía, explicó que la producción de estas estufas se realizará en las mismas comunidades, fortaleciendo la economía local. Por su parte, Ariadna Montiel Reyes, titular de Bienestar, destacó que las comunidades serán incorporadas al catálogo de beneficiarios del Fondo de Infraestructura Básica, lo que les permitirá gestionar y proteger sus propios recursos.
El evento también fue un reconocimiento a la autonomía y el autogobierno indígena. Ramírez Bedolla recordó que Michoacán reconoce cuatro niveles de gobierno: el federal, el estatal, el municipal y los autogobiernos indígenas. Actualmente, 45 comunidades y 155 mil personas se rigen bajo estos principios.
Adelfo Regino Montes, director del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI), señaló que este es el primer Plan de Justicia para Pueblos Originarios que se implementa en el país. Destacó que ya se llevó a cabo una primera asamblea con 158 autoridades indígenas y que se abordarán temas fundamentales como tierra y territorio, medioambiente, lengua, cultura, identidad y bienestar integral.
Magda Aidé Pedro Bautista, secretaria del Comisariado de Bienes Comunales de Cherán Atzicuirín, dijo que esta ruta de trabajo “no solo cuida nuestros bosques y aire, también cuida la salud de nuestras mujeres”.
“El Plan de Justicia del Pueblo P’urhépecha es fruto de muchas asambleas, de muchas palabras colectivas, de mucha historia”, afirmaron los habitantes en voz colectiva. “Es el derecho de decir cómo queremos vivir, cómo cuidar nuestras tierras, cómo fortalecer nuestras lenguas y saberes”.
La implementación del Plan será coordinada por los propios dirigentes comunitarios, el INPI, la Secretaría del Bienestar, la Subsecretaría de Ciencias y Humanidades de la SECIHTI y Lázaro Cárdenas Batel, jefe de Oficina de la Presidencia y coordinador del Plan Lázaro Cárdenas.
Con esta iniciativa, el Gobierno de México avanza hacia una política de justicia transformadora para los pueblos indígenas, con el pueblo P’urhépecha como ejemplo de dignidad, lucha y resistencia.