A las ocho con 23 minutos de la noche, la cantante española “La Rosalia” hizo vibrar con el potente ruido de sus motores el Zócalo de la Ciudad de México con una de sus canciones más emblemáticas, ‘Saoko’. Con el baile sensual que caracteriza a “La Motomami”, siguieron hitazos como ‘Bizcochito’, y ‘La Noche de Anoche’.
“La Noche de Anoche fue algo que yo no puedo explicar”… fans de Guerrero e incluso de países de América Latina como Argentina, fueron parte de los 160 mil asistentes que se dieron cita en la plancha del Zócalo capitalino para corear a Rosalía Vila Tobella, la noche de este viernes 28 de abril.
Como ya es costumbre, para demostrarle su cariño los mexicanos le lanzaron un peluche del Dr. Simi, cariño que es correspondido, pues “La Rosalia” cerró la gira del “Motomami World Tour” del continente Americano, en nuestro país.
“México quiero que sepas que estoy muy agradecida del cariño que me has dado desde el inicio de mi carrera”.
Continúo el concierto y le siguió ‘La Fama’ dónde “La Motomami” se puso sus gafas oscuras para darnos ‘un aventón de adrenalina’.
Durante una hora con ocho minutos, la española se ganó la ovación “Rosalia, hermana, ya eres mexicana…”
Aunque breve, pero sin quedar a deber ningún éxito, el espectáculo que estremeció al público por su peculiar música, un estilo experimental que entremezcla el flamenco con estilos urbanos como el reguetón, hip-hop, pop, trap y música electrónica, una canción icónica de esta mezcla es ‘Despechada’, una de las canciones que más cimbró el corazón de la Ciudad de México.
“Wow, ¡México, cuánta energía! ¡Con razón me encanta venir aquí!”
Vestida de negro y rojo, cabello recogido en una coleta y los labios rojos, “La Motomami” llora, ríe, suda, toca el piano y baila con la sensualidad que la caracteriza.
Suena ‘El que quiero no me quiere, Como quiero que me quiera, Hoy termina la condena, Me diviertes, maybe tú eres el que me libera…’ y la gente vuelve a enloquecer.
Considerada un fenómeno musical, “La Rosalía” conquistó al público mexicano, un público que acampó, que resistió los fuertes rayos de sol, que desde muy temprano se dio cita para disfrutar de este concierto gratuito. La espera valió la pena, pues la cantante catalana mantuvo a sus miles de espectadores llenos de energía con sus potentes coreografías.
Rosalia cantó a capella ‘La Llorona’ mientras le brotaban lágrimas de ‘puro agradecimiento’, aseguró.
Cantó ‘Héroe’ de su compatriota Enrique Iglesias y después llegó una canción ‘Con altura’ donde motomamis y motopapis volvieron a meter el acelerador.
Durante la canción ‘Beso’, miles de espectadores esperaron que saliera su novio, el reggaetonero Rauw Alejandro, a hacer el dueto de la pareja del momento, lo que no sucedió.
Ya enfilado el final del concierto, “La Motomami” se subió en un patin para entonar otro de los éxitos más esperados; ‘Chicken teriyaki’.
Finalmente la joven de 30 años cerró cerca de las diez de la noche con la canción que la hizo alcanzar la fama mundial: ‘Malamente’, el primer sencillo de su disco ‘El mal querer’.
Una noche que, en palabras de la misma Rosalía, “ha sido el concierto más grande que ha dado en su carrera”.