El Gobierno de la Ciudad de México informó que este domingo 20 de julio se llevaron a cabo diversas movilizaciones sociales en distintos puntos de la capital, todas con acompañamiento institucional para garantizar el pleno ejercicio del derecho a la libre expresión y la seguridad de manifestantes y terceros. Las marchas concluyeron con saldo blanco.
Entre las acciones registradas se encuentra la Segunda Marcha Contra la Gentrificación, que reunió a cerca de 600 personas. El contingente partió desde la estación Fuentes Brotantes de la Línea 1 del Metrobús, recorrió la avenida Insurgentes hasta la zona de El Caminero, en la alcaldía Tlalpan, y posteriormente regresó hacia Ciudad Universitaria. La movilización comenzó alrededor de las 16:00 horas y concluyó sin mayores incidentes.
El recorrido transcurrió de manera mayoritariamente pacífica, con algunas afectaciones menores en infraestructura pública por pintas realizadas por un grupo de encapuchados bajo el puente de Insurgentes. Personal del Escuadrón de Rescate y Urgencias Médicas (ERUM) atendió tres servicios médicos sin que se requiriera traslado hospitalario.
El acompañamiento institucional fue realizado por personal de la Subsecretaría de Concertación Política, Prevención y Buen Gobierno, así como por la Brigada de Diálogo y Convivencia de la Secretaría de Gobierno, en conjunto con la Dirección General de Gobierno y la Instancia Ejecutora del Sistema Integral de Derechos Humanos.
Además, se reportó una marcha en apoyo a Palestina en inmediaciones del Ángel de la Independencia, que se dirigió hacia Avenida Juárez de forma pacífica, así como una protesta en Plaza San Carlos, colonia Tabacalera, en rechazo al retiro de esculturas en el lugar.
En todos los casos, las autoridades capitalinas aplicaron el Protocolo de Actuación para Marchas y Concentraciones Públicas, impulsado por la jefa de Gobierno, Clara Brugada Molina, el cual contempla acciones como filtros preventivos, vigilancia perimetral, y presencia de personal capacitado para el diálogo y la mediación, sin criminalizar la protesta.
El Gobierno capitalino reafirmó su compromiso con la atención respetuosa a las manifestaciones sociales, garantizando el libre ejercicio del derecho a la protesta sin afectar la integridad de las personas ni el funcionamiento de la ciudad.