Trasladan migrantes de Alligator Alcatraz a otros centros de detención migratoria en EEUU

Luego de que una jueza federal de Estados Unidos ordenara el cierre del centro de detención de inmigrantes Alligator Alcatraz, en Florida, decenas de migrantes que se encontraban detenidos en dicho sitio fueron trasladados a través de autobuses a otras instalaciones migratorias.

Tras la orden de la jueza Kathleen Williams, en la que dio un plazo de 60 días para desmantelar la infraestructura de Alligator Alcatraz, argumentando que dicha instalación no cumplía con estándares legales y de derechos humanos, ahora la población de personas migrantes que se encontraban detenidas pasó de 336 a 100 personas.

Las personas que se encontraban en Alligator Alcatraz fueron removidas a otros centros de detención ubicados en otras ciudades, como lo son Luisiana en Nueva Orleans; Miami, Florida o a Fort Bliss, en el Paso Texas.

Ante el desmantelamiento de las instalaciones para el cierre de Alligator Alcatraz, el gobernador de Florida, Ron DeSantis, anunció su “Plan B”, que consiste en la apertura de un nuevo centro llamado “Deportation Depot”, ubicado en la Institución Correccional Baker, cerca de Jacksonville, el cual cuenta con capacidad para 2 mil detenidos.

Con este movimiento, Florida busca mantener la detención y procesamiento de migrantes indocumentados, a pesar de que la jueza federal Kathleen Williams ordenó desmantelar la infraestructura de “Alligator Alcatraz” en un plazo de 60 días.

El llamado Plan B de la administración de DeSantis dejó ver que sus políticas migratorias seguirán firmes, incluso, si eso significa abrir un nuevo centro casi de inmediato.

Cabe señalar que, el Gobierno federal de Estados Unidos presentó una apelación para intentar revertir la orden judicial.

Recordemos que el desmantelamiento de Alligator Alcatraz se dio tras una demanda de grupos ambientalistas y de ciudadanos de una tribu local de Florida, por lo que la jueza federal determinó que el centro de detención migratorio no podrá recibir nuevos detenidos, y deberá desmantelar su infraestructura en 60 días.

En un fallo de 82 páginas, la jueza Kathleen Williams admitió que se mantengan en el sitio los detenidos actuales sin incorporar nuevos. También señala que se incumplieron leyes ambientales e impone severas restricciones al funcionamiento del centro, que aloja a inmigrantes antes de su deportación.

Además, la decisión judicial dispone que deberá removerse cualquier barrera que impida el acceso de los miembros de la tribu Miccosukee a sus tierras ancestrales.