Un recuento laboral del 2022

El año que recién terminó tiene en su haber reformas laborales y acontecimientos importantes para el mundo del trabajo, y que con relación a México aquí recordamos.

Durante el 2022 se publicaron diversas reformas a la Ley Federal del Trabajo (de más reciente a más antigua):

• El 27 de diciembre, se reforman los artículos 76 y 78, en materia de vacaciones. Pasan de 6 a 12 días el primer año de antiguedad, aumentables en dos días los subsiguientes años, hasta el sexto año; y a partir de dicho año, cada cinco años de antigüedad posteriores, se aumentará en dos días; siendo el derecho del trabajador/a elegir disfrutar los periodos completos o distribuirlos en partes.
• El 18 de mayo, se reforma el artículo Quinto Transitorio de la reforma en materia de justicia laboral, publicada el 1 de mayo de 2019. Estableciendo que el plazo máximo de inicio de funciones de los Centros de Conciliación locales y los Tribunales del Poder Judicial de las Entidades Federativas, a más tardar sería el 3 de octubre de 2022.
• El 28 de abril, se adiciona un párrafo segundo al artículo 512. Agregando la precisión que “En los casos en los que existe un alto riesgo que implique la pérdida de la vida o se comprometa seriamente la salud del trabajador, considerando, sobre todo la naturaleza del trabajo, las disposiciones reglamentarias o normativas considerarán el uso de la tecnología y de las herramientas de trabajo que sean innovadoras y que coadyuven a las labores de seguridad en los centros de trabajo.” (Sic).
• Igualmente, el 28 de abril, se reforma la fracción IX del artículo 132 y la fracción V del artículo 204. Estableciendo como una hipótesis expresa de las obligaciones de los empleadores el conceder permiso para que las y los trabajadores acudan a participar en la “Revocación del mandato”.
• El 5 de abril, se reforma el artículo 176, fracción II, numeral 8. Considerando como labores peligrosas para el trabajo de menores: Trabajo Agrícolas, forestales, de aserrado, silvícolas, de caza y pesca, que impliquen el uso de químicos, manejo de maquinaria, vehículos pesados, y los que determine la autoridad competente.

Además de dichas reformas, el nuevo sistema de justicia laboral (que se destaca por la creación de tribunales laborales pertenecientes al poder judicial, la conciliación pre-judicial y la libertad y democracia sindical), entró en vigencia plena el 3 de octubre pasado. Dicha implementación se dio en tres etapas: la primera inició a partir del 18 de noviembre de 2020; la segunda, 3 de noviembre de 2021, y la tercera, el citado 3 de octubre de 2022, por lo cual ya es obligatorio en todo el país.

Asimismo, podríamos recordar acontecimientos de todo tipo; por ejemplo:

• En materia sindical se llevó a cabo la elección de una nueva dirigencia sindical nacional del STPRM (sindicato titular del contrato colectivo de trabajo en PEMEX).
• En materia judicial destacó la publicación de jurisprudencia que sustituye a la famosa 1/96, por parte de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, estableciendo que los organismos descentralizados cuentan con “libertad configurativa” para adscribir sus relaciones de trabajo al apartado A o B del artículo 123 de la Constitución. 
• Respecto a la pandemia se concluyó el trámite virtual de incapacidad por COVID-19.
• También existieron noticias muy tristes: las líneas de la pobreza aumentaron (de acuerdo con datos de CONEVAL:  https://www.coneval.org.mx/Medicion/Documents/Lineas_de_Pobreza_por_Ingresos/Lineas_de_Pobreza_por_Ingresos_sep_2022.pdf); conocimos del derrumbe de una mina de carbón en Coahuila; y fallecieron el Secretario General del STUMAN, Lic. Agustín Rodríguez Fuentes, y uno de los reconocidos laboralistas de nuestra Máxima Casa de Estudios, Dr. José Dávalos Morales. 

Este año 2023 inicia junto con el aumento al salario mínimo, aprobado en diciembre por la CONASAMI (incrementó 20% quedando en $207.44 y en la frontera norte en $312.41, pesos diarios), así como las nuevas reglas de vacaciones legales.

Con esta descripción apretada podemos diagnosticar un año agridulce, y en el que lo positivo sin duda se encuentra en la mayoría de reformas comentadas, sin embargo -como también lo he dicho en columnas pasadas- no olvidemos que la pobreza no se elimina por decreto, y para ello se requiere de la voluntad y acción de tod@s. 

Cada año tengo la esperanza que las y los trabajadores no seamos el pariente pobre de la democracia (como decía el sindicalista español Marcelino Camacho) y que la fuente de dignidad de nuestro país se genere a través del trabajo (tanto del obrero como de su empleador y de los consumidores finales) o como señalaba Tolstoi “La condición esencial de la felicidad del ser humano es el trabajo”. Hagamos nuestras estas utopías, y más aún: con nuestro trabajo hagámoslas posibles, ¡Feliz 2023!