Legislar para el bienestar de las personas y no para el capital.

El presidente Andrés Manuel López Obrador emitió un Decreto el 31 de diciembre de 2020 para eliminar gradualmente el herbicida llamado glifosato. Ese Decreto presidencial fue recibido con gran aprobación por la población mexicana porque está confirmado por la misma Organización Mundial de la Salud que el herbicida es sumamente dañino para la humanidad. Además, esa acción del Gobierno de México da continuidad a la lucha incansable de la sociedad mexicana por reconocer al maíz como patrimonio biocultural y para impedir la introducción de variedades genéticamente modificadas que permiten su apropiación a través de patentes, las cuales deterioran el reservorio genético que se ha construido durante miles de años. El decreto, publicado en el Diario Oficial, establece las acciones que deberán realizar para sustituir gradualmente su uso, adquisición, distribución e importación del glifosato y de los agroquímicos utilizados en el país que contengan este activo. El documento señala que deberán modificarse «por alternativas sostenibles y adecuadas, que permitan la producción y resulten seguras para la salud y la diversidad biocultural del país», se tiene como plazo límite para esta transición hasta enero de 2024.

El glifosato es el herbicida más usado en todo el mundo y fue introducido al mercado por la empresa Monsanto en 1974, se aplica para evitar el brote de «maleza» y dejar el paso libre a los cultivos controlados. Algunos agricultores lo utilizan también antes de cosechar los campos porque al crear un efecto de secado, es más fácil recolectar lo sembrado.

Estudios científicos y médicos señalan que los efectos del herbicida glifosato sobre la salud humana son: Dolores de cabeza frecuentes, fatiga, ansiedad, irritación de mucosas y piel, alergias en personas que están expuestas ocupacionalmente, causa daños en distintos órganos y sistemas. Está relacionado con el desarrollo de enfermedades metabólicas y neurológicas, actúa como disruptor endócrino y agente causante de serios desórdenes en el sistema reproductivo. Es un potencial genotóxico, desarrollo de cáncer de distintos tipos como son: leucemia, melanoma, mieloma múltiple, linfoma no Hodgkin, así como cavidad oral, próstata, tiroides, colon, pulmón, recto, páncreas, riñón, vejiga y próstata. Produce estrés oxidativo, que a su vez se relaciona con el desarrollo de varias enfermedades crónico degenerativas.

Existe evidencia sólida —y sin conflictos de interés— que demuestra que la carcinogenicidad del glifosato, puede heredarse hasta en tres generaciones, señaló el mismo Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología.

Sin embargo, el pasado miércoles 16 de noviembre en el Senado de la República se presentó un grupo de agricultores y productores que acompañaron en rueda de prensa a los senadores morenistas Nancy Sánchez, Rafael Espino y Arturo Bours, quienes presentaron una iniciativa de ley —también suscrita por el senador Ricardo Monreal— a través de la Comisión de Agricultura del Senado que preside Nancy Sánchez.

Argumentan —para defender el uso del herbicida— que podría desatarse una crisis alimentaria sin el uso de esos productos, señalan que «Conacyt les ha quedado a deber con el sustituto», la iniciativa plantea legislar límites permisibles del herbicida, propone armonizar las estrategias para abatir el hambre y elimina la definición de alta toxicidad en su documento.

Llama mucho la atención que los senadores proponentes se han dedicado a obstaculizar la votación de un dictamen que se encuentra en la Comisión de Salud, que trata de la eliminación gradual de los plaguicidas y herbicidas altamente tóxicos, derivado de una iniciativa de ley que propuso la senadora —también morenista— Ana Lilia Rivera, contando con el respaldo de la presidenta de la Comisión de Salud. El pasado miércoles, fue la cuarta vez que se pospuso la votación. Al mismo tiempo los senadores del ala pragmática que se presentaron en rueda de prensa llegan con contrapropuesta de Iniciativa desde la Comisión de agricultura.

¿De parte de quién?

Estaremos pendientes de esta discusión, del curso legislativo de estas dos iniciativas, del cabildeo de las trasnacionales y sus aliados, siempre señalando que es fundamental cumplir con el Decreto de AMLO sobre la prohibición del herbicida altamente peligroso, avanzar hacia la autosuficiencia alimentaria, pero siempre poniendo el bienestar y la salud de la población por encima de cualquier interés económico.